El taller-floristería presenta sus nuevas propuestas para novias que buscan un ramo original que se salga de lo común.
Savia Bruta vuelve a huir de estereotipos y convencionalismos en su nueva colección de ramos de novias. Lindsey y Alex, creadores de Savia Bruta, apuestan por ramos que cuentan historias y provocan emociones en una colección tan urbana y cosmopolita como su propio taller.
Fieles a la esencia de Savia Bruta, presentan una colección que huye de prejuicios y reinventa el concepto de novia en sí mismo. Color y mezcla, son los dos pilares que sustentan las propuestas de Savia Bruta. 
Encontramos ramos monocromáticos o en la misma gama de tonos, trabajando el color desde el pastel, pasando por el tono puro y llegando hasta tonalidades envejecidas.
Una colección que hace un recorrido por el mundo del color, teniendo como punto de partida el blanco y como culmen los ramos multicolor.
La mezcla viene de la mano de la experimentación, incluyendo materiales secos, teñidos u hojas pintadas para poder hacer ramos completamente monocromáticos. Se busca una armonía basada en un equilibrio que mezcla materiales frescos, secos y liofilizados con material pintado. Convergen materiales grandes y pequeños, contraponiendo texturas, en un juego experimental que consigue transformarse en sentimientos.
El contraste entre la materia prima, lo vegetal y floral, la materia trabajada y pintada, es el reflejo de la evolución de la floristería actual. Encontramos una flor trabajada, tratada como se pueden trabajar las telas o los alimentos, sin que por ello pierda su naturalidad ni su aspecto poético, tratando la flor para conseguir un valor añadido.
Entre los materiales se encuentran ranúnculos, rosas de jardín, rosas ramificadas, paniculatas teñidas, orquídeas, ramas, hojas pintadas, fruto de loto, cineraria o escabiosa, que dan la mano a narcisos, hiedras, costillas de Adán, fresias o claveles.
Se juega también con las formas, en una colección pensada para ser tan diferente y única como la propia novia. Diferentes gustos, estilos y conceptos que, tomando forma de ramos, van desde lo grandes a lo asimétrico, pasando por formas de cascada y forma circulares.
Las fotos de la colección son reflejo de la concepción urbana y cosmopolita de Savia Bruta.
Como en un mini reportaje de su barrio, descubrimos una colección que reinventa el concepto de ramo y de novia. Alejándose de estereotipos y encorsetamientos, descubrimos el corazón del Madrid más castizo en el que, paradójicamente, todo es modernidad.
Una visión única que lleva a experimentar y explorar, saliéndose de lo establecido pero manteniendo la esencia de la floristería que podéis descubrir en su taller en Travesía del Reloj número 4.
Fiel a sus principios, 
Mythologie vuelve a situar a la mujer en el centro de su universo, poniéndose a su servicio par así cumplir sus deseos. Como evolución de sus anteriores colecciones, 
Yahaira Iriarte vuelve a apostar por sus característicos dos piezas, sello inconfundible de la casa. El color vuelve a ser protagonista, encontrando detalles muy cuidados, como botones y encajes de hilo negro, bordados florales en verde y rosa o cintas de terciopelo. Los botones joyas, el largo midi y el mencionado color negro se posicionan como algunas de las novedades de la colección, en la que también se incorporan nuevas texturas, tejidos, colores, formas y volúmenes.
Las sedas, las gasas, los rasos y los encajes trabajados dan forma a cinco vestidos de ensueño que reciben el nombre de figuras femeninas poderosas de la mitología, como Hera o Atenea. Piezas en las que se impone el mimo por el detalle, con acabados muy depurados en los que se aúna diseño y versatilidad.
Victoria Imaz sorprende con su juego entre lo femenino y lo casual, lo cuidado y lo natural. 
María Baraza inunda con su clásica elegancia las dunas, creando un aura mágica que consigue transportarnos lejos. 
Entre la arena, encontramos los vestidos de José María Peiró, siempre en constante contacto con la naturaleza.
El diseño, la versatilidad y la accesibilidad son las señas de identidad de Victoria Imaz, dando lugar a creaciones que se pueden personalizar y diseñar a medida para lograr reflejar la personalidad de cada novia.
Una colección en la que podemos encontrar ramos reinventados en los que el sentimiento y la emoción son vitales. Flores románticas y suaves por naturaleza como las anémonas, las rosas, los ranúnculos o las orquídeas se convierten en protagonistas. Las flores blancas, cremas y pastel dan paso a tonos morados y rojos; colores majestuosos, con confianza y fuerza para caminar con paso firme hacia el altar.
En Savia Bruta quieren dar el siguiente paso, ligando lo romántico y lo clásico con ideas de diseño renovadas. Ramos semicirculares con orquídeapaphiopedilum y flores silvestres capaces de hacer soñar a las novias más escépticas. Ramos en cascada que se mueven contigo y en cada ángulo ofrecen una cara nueva.
Ramos vivos que te emocionan y cuentan tu historia. Descubre su colección en su página web o acércate a conocer su trabajo en su taller en la Travesía Reloj número 4.
La firma presenta un primer look compuesto de dos piezas con cuerpo de bámbula de seda adornado con aplicaciones de guipur bordado en pedrería. El top se complementa con una delicada falda de tul de seda.
En una segunda propuesta, Imaz brinda un conjunto majestuoso con un vestido de crepé de corte asirenado en el que las flores son las protagonistas. Los delicados bordados en tonos dorados compiten con una espalda y hombros llenos de flores tridimensionales. Un vestido único pensado para novias que buscan ser ellas mismas en su gran día.
La clásica elegancia de María Baraza inunda de luz con su velado hechizo y sus bordados. Una apasionante armonía entre el color de sus bordados y los toques azules del tocado de Martina Dorta.
José María Peiró para el tiempo entre relojes, adentrándose en una solitaria caseta para hacerla suya. Una novia solemne e inmensa que llena cada espacio a su paso, capaz de captar todas las miradas en un juego de contrastes.
Entre libros y butacas, descubrimos una mujer distinta con cierto aire desafiante. Juana Rique propone una novia rockera, con botas y cazadora de cuero. Un look teatral, coronado por la tiara y pendientes de Martina Dorta, digno de protagonizar infinitas obras.
Una novia salida de los cuentos que ella misma lee. Así es la novia de Victoria Imaz, soñadora, sofisticada y culta. Una “Bella” moderna dispuesta a escribir su propia historia, marcando su paso firme con los botines de Serena Whitehaven.
La joyas de Blanca Barcelona, cuidadosamente elegidas, aportan elegancia y sutileza a estas cinco novias.
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